martes, 12 de octubre de 2010

Venoco - las apariencias engañan

Diario El Universal de Venezuela: “Con la orden de expropiación y ocupación de Industrias Venoco y todas sus empresas filiales, el Gobierno nacional, a través de Petróleos de Venezuela, se garantiza el dominio del mercado de lubricantes de tipo medio para uso final al detal, así como el del mercado de grasas y lubricantes de uso industrial”.

Hasta allí nada fuera de lo habitual en la Venezuela bolivariana. Todas las semanas el presidente Hugo Chávez anuncia la expropiación de alguna empresa, edificio, agroindustria, fábrica o similar. Ahora le tocó el turno a la petroquímica Venoco, una de las empresas más grandes de ese país.

Lo curioso es el dato que el diario relega a los párrafos 10 y 11 de la nota:

“Los datos técnicos del ministerio de Finanzas señalan que el presidente de Industrias Venoco es Ricardo Barreto Muskus, desde el año 2006. Entre la junta directiva aparecen Luis Isava, Eduardo Salinas, Carlos Benshimol, Ignacio Jorquera, Franklin Durán y Carlos Kauffman.

Durán y Kauffman son los mismos involucrados en el caso del maletín con 800 mil dólares hallado a Guido Alejandro Antonini Wilson, en un vuelo de Pdvsa que aterrizó en el aeropuerto de Buenos Aires, Argentina, en 2007”.

En rigor, cabe aclarar, Durán y Kauffmann son (o al menos eran hasta la última vez que me fijé) los verdaderos y únicos dueños de Venoco.

O sea, que Chávez ordenó la expropiación de la empresa en la que, para más datos, Guido Alejandro Antonini Wilson figuraba como asesor y con cuya tarjeta de negocios se presentó en la Argentina cuando ocurrió el decomiso de la valija con cerca de 800.000 dólares.


Pero no todo lo que reluce es oro. El título no es que “Chávez expropió la empresa vinculada al imperialismo” o algo así como podría imaginarse.

No.

Nelson Bocaranda, pa’ mí uno de los mejores periodistas –por lejos- de Venezuela alertó que se trata de “un negocio planteado desde hace semanas, ya que PDVSA quería comprarla y estaba negociando”.

Ergo, o ahora expropiaron y pagarán más dinero por la compañía o ahora expropiaron lo que ya estaba por venderse y sólo pagarán el monto ya acordado de venta.

Pregunta: si en efecto Kauffmann y Durán continúan como socios y son los que cobrarán una montaña de dólares por la expropiación de Venoco, ¿cómo les pagarán sus respectivas tajadas?

Porque Kauffmann, en teoría, no puede retornar a Venezuela y vive en Estados Unidos –donde corre carreras de Porsche-, mientras Chávez lo define como una cucaracha del imperio. Y Durán sí es un héroe bolivariano, pero continúa preso en una cárcel de Florida.

pd1: más datos, acá.

pd2: aclaración/sugerencia: no llamen al teléfono, ni escriban al email que figuran en la tarjeta de Antonini Wilson. Ambos fueron dados de baja.

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