viernes, 29 de junio de 2012

¿Listas negras?

Funcionaria de extrema confianza del vicepresidente Amado Boudou, la presidenta de la Casa de Moneda, Katya Daura, señala por lo bajo a otros funcionarios del Gobierno por los problemas que afronta en el organismo. En particular, centra sus dardos en el secretario de Hacienda –y ex titular de la propia Casa–, Juan Carlos Pezoa.

Otros tiempos.

La protesta de los trabajadores tomó fuerza, sin embargo, ante ciertas acciones de Daura, que amenazó con “llevarse puesto a todos” los empleados con contrato y que tenía “línea directa” con Boudou para hacerlo, según relataron empleados del organismo que detallaron el envío de cartas documentos y telegramas “amenazadores”.

Y ayer.

Los trabajadores también denunciaron la irrupción, anteayer, de policías dentro de las instalaciones y la aplicación de “listas negras” para vetar el ingreso al comedor de los que participan en la huelga. También, algunas contrataciones polémicas, como las de una amiga “del country” de Pilar de Daura, otra de su infancia en Misiones, sobrinos, un chofer y secretarias que cuidan a sus hijos, entre otras personas, con salarios de categorías altas.

pd: la nota completa publicada hoy en LA NACIÓN, acá.

jueves, 28 de junio de 2012

Ni que fuera Aurora Grundig

Allá, en la prehistoria de mi infancia, había un tipo con plumas de cacique que remataba sus publicidades con "Caro, pero el mejor". 5000 años después, la nueva Ciccone que preside Alejandro Vandenbroele quizá deba reflotar aquel eslogan (aunque eso de que sus billetitos sean los mejores todavía está por verse, dados los resultados obtenidos hasta ahora...).


El precio de imprimir billetes de la nueva Ciccone Calcográfica es imbatible, pero por lo costoso. Así surge de su comparación con las cotizaciones ofertadas por otras compañías, públicas y privadas, durante los últimos dos años en documentos de los hermanos Héctor y Nicolás Ciccone e informes oficiales del Banco Central (BCRA).

  • Hace dos años, la “vieja” Ciccone, aún bajo el control de los hermanos Nicolás y Héctor Ciccone, propuso cobrar $ 136,50 por cada millar de billetes de baja graduación que imprimiría como subcontratista de la Casa de Moneda;
  • En octubre de 2010, la firma rival Boldt, que tras la quiebra de Ciccone había alquilado su planta por un año, le ofertó al BCRA imprimir –con las máquinas y personal de la propia Ciccone– a un precio de $ 265 el millar de billetes de 100 pesos;
  • También en octubre de 2010, la Casa da Moeda do Brasil en tándem con la Casa de Moneda local, tasó su valor en $ 338,99 por ese mismo millar de billetes de 100 pesos, y terminó por quedarse con el contrato del BCRA;
  • Ya en abril de este año, el Banco Central acordó pagarle $ 383,92 a la Casa de Moneda local por cada millar de billetes que imprimiera de 5 pesos; y un valor de $492,17 pesos por millar de billetes de 50 y de 100 pesos;
  • Cuatro días después, la Casa de Moneda subcontrató a la ex Ciccone a un precio de $ 392,04 por imprimir cada millar de billetes de 100 pesos cuya terminación luego deberá completarse en la propia sociedad estatal.
Así, el precio que Vandenbroele obtuvo del Estado quedó muy por encima –en pesos, en dólares y en porcentuales– de todos los valores anteriores: de la propia ex Ciccone, de Boldt (con las mismas planta, máquinas y personal que controla hoy el supuesto testaferro del vicepresidente Amado Boudou), de la Casa da Moeda de Brasil y de la Casa de Moneda local.

pd: el resto de la nota publicada el domingo en LA NACIÓN, acá.

miércoles, 27 de junio de 2012

Las habas de los legisladores gringos

En todos lados se cuecen habas. Y es erróneo pensar que la Argentina es el peor país del planeta (o sus dirigentes, sean políticos, empresariales, sindicales o sociales) o, por el contrario, idealizar otras naciones. Sólo las conocemos menos.

Va un ejemplo, expuesto por una extraordinaria investigación periodística de The Washington Post, el mismo que lideró el caso Watergate y que enloqueció a George W. Bush ahora verificó que casi tres docenas de legisladores reacomodaron sus carteras de inversiones durante la crisis de Wall Street DESPUÉS de mantener conversaciones con funcionarios del Departamento del Tesoro y de la Reserva Federal.



Más claro: en pleno colapso de 2008/2009, legisladores y funcionarios de la administración Bush coordinaron esfuerzos y cruzaron información para buscar posibles salidas a la crisis. Pero hubo algunos (34 para mayor precisión) que utilizaron la información privilegiada para comprar o vender títulos, acciones y mucho más. En otras palabras: insider trading. Un delito de cuello blanco.

Más aún, como parte de su investigación “Capitol Assets”, el Post también detectó que docenas de legisladores o sus familiares invirtieron y movieron inversiones por cientos de millones de dólares en compañías que a su vez desarrollaban tareas de lobby sobre ellos.

Porque en todos lados, en efecto, se cuecen habas.

pd: los links a la cobertura del Post, acá.

martes, 26 de junio de 2012

GAFI - bien, pero no te apures

El principal foro intergubernamental del mundo para la lucha contra el lavado elogió ayer los “pasos sustanciales” dados por el Gobierno para prevenir y combatir el blanqueo de activos, pero decidió mantener al país bajo el proceso de revisión especial, conocida en la jerga como “lista gris”. Así lo dispuso luego de que la delegación argentina intentó acelerar los tiempos y abrió una discusión que terminó por resultarle contraproducente, indicaron testigos del encuentro.


La Argentina quedó así en una situación incómoda al concluir la reunión plenaria del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI) celebrada en Roma. Por un lado cosechó un elogio contundente por sus avances, pero provocó que el foro rechazara su pedido para que una nueva delegación oficial del propio foro visite el país. Más aún, agudizó sus diferencias con algunos países clave, incluido Estados Unidos, que definieron la posición del plenario.

El error estratégico de apurar los tiempos de la comitiva local provocó algo más dentro del GAFI. “Generó molestia y fue considerado como un acto de soberbia que empañó lo que habría sido un resultado más favorable”, detalló un informante, que consignó que Brasil empezó por apoyar la moción argentina hasta que derivó en un enfrentamiento abierto con varias delegaciones

pd: el resto de la nota publicada hoy en LA NACIÓN, acá.

lunes, 25 de junio de 2012

Ciccone1 vs. Ciccone2

Con las mismas máquinas, en la misma planta, con el mismo personal y por una emisión menor de billetes, la nueva Ciccone Calcográfica obtuvo, con apenas dos años de diferencia, un contrato del Estado que es 187% más caro que el precio que la vieja Ciccone propuso –y no logró– con el Gobierno, según surge de tres documentos de la empresa que obtuvo LA NACION y confirmaron dos fuentes oficiales.

Resulta casi un trabalenguas, pero la comparación es elocuente. La “nueva” Ciccone, presidida por Alejandro Vandenbroele, consiguió lo que no lograron los fundadores de la imprenta, Nicolás y Héctor Ciccone. Es decir, que el Gobierno le pague por imprimir dinero. Y lo logró, cobrando mucho más por imprimir muchos menos billetes.


La oferta de la “nueva” Ciccone –rebautizada Compañía de Valores Sudamericana (CVS)– ya es conocida desde que LA NACION reveló el contrato que firmó con la Casa de Moneda el 16 de abril último. Imprimirá 410 millones de billetes de 100 pesos a cambio de $ 160,7 millones.

Dos años atrás, sin embargo, Nicolás Ciccone y su hermano Héctor presentaron una oferta mejor ante el secretario de Hacienda, Juan Carlos Pezoa [foto, arriba], según consta en documentos de la vieja compañía cuya copia obtuvo LA NACION. Propusieron imprimir 480 millones de billetes por un total de $ 65,5 millones. Es decir, más cantidad –lo que bajaba el costo de producción–, por menos dinero.

pd: el resto de la nota publicada en LA NACIÓN, acá.

viernes, 22 de junio de 2012

El teniente Gamboa

“El héroe más puro de esta novela”, remarca el escritor español Javier Cercas, es el teniente Gamboa, “capaz de demostrar con su comportamiento que, en una institución podrida, reflejo de una sociedad podrida, el  éxito auténtico reside en la derrota”.

Ése es el eje central de “La ciudad y los perros”, el librazo de Mario Vargas Llosa que analiza Cercas y que cumple 50 años desde su lanzamiento con galas de honor por la Real Academia Española.


Sin embargo, en su análisis “La pregunta de Vargas Llosa”, Cercas va más allá de la cuestión de la pureza o él éxito en la derrota. “Formulada con expeditiva tosquedad –escribe–, la pregunta podría ser esta: ¿basta la fidelidad sin fisuras a una determinada escala de valores para actuar correctamente, para alcanzar algún tipo de decencia moral, alguna clase de salvación ética?”.

Esa es la pregunta decisiva que subyace en “La ciudad y los perros”, la reformulación de la ética de la convicción delineada por Max Weber en contraposición con la ética de la responsabilidad, que a menudo deriva en la práctica en el relativismo moral.

Y es la pregunta, también, que subyace muchas veces cuando llega el momento de encarar una investigación sobre hechos de corrupción política o empresarial en la que el juez, el fiscal o el periodista sabe, de antemano, que tiene todas las de perder.

pd: el estupendo análisis de Cercas, acá.

jueves, 21 de junio de 2012

100.000 gracias

Jamás imaginé algo así.

Pero por lo visto, siempre hay un roto para un desconocido (¡Cuac!).


Quizá eso explique que este blog haya superado las 100.000 visitas según el contador Whos.Among.Us (el propio de Bogspot indica que va por las 120.000). Pero ya fuera de broma:

GRACIAS.

Espero que a por lo menos un o una visitante (venidos de cuatro continentes) le haya servido la información que subo. Si es así, el esfuerzo valió.


pd1: ¿los 10 países con más lectores? Argentina, Estados Unidos, México, Venezuela, España, Colombia, Perú, Canadá, Chile y Uruguay.
pd2: ¿los países más inesperados? Tailandia, Botswana, Sri Lanka, Rusia, Pakistán, Malasia, República Dominicana, Mozambique, Suecia y Nueva Zelanda.

miércoles, 20 de junio de 2012

Watergate: 40 años y 5 mitos

La inglesa BBC publicó un muy interesante texto sobre Watergate, a 40 años del incidente que fue el comienzo del fin para el entonces presidente Richard Nixon.

Escrito por el profesor en la Escuela de Comunicación de la American University, Joseph Campbel, el texto aborda cinco mitos alrededor del escándalo que terminó con la caída de Nixon y la (errónea) entronización de dos periodistas: Bob Woodward y Carl Bernstein.

El primero de ellos es creer que ambos, Woodward y Bernstein, junto al diario The Washington Post fueron los que tumbaron a Nixon. Falso.


“Llevar el caso de un escándalo de la magnitud y complejidad de Watergate requirió de los esfuerzos colectivos de fiscales especiales, jueces federales, el pleno del Congreso, la Corte Suprema, así como el Departamento de Justicia y el FBI”, remarca Campbel.

“Aún así, hubiera sido muy probable que Nixon sobreviviera el escándalo de no ser por las grabaciones magnetofónicas que realizó en secreto de las conversaciones en la Oficina Oval de la Casa Blanca. Sólo cuando fue ordenado por la Corte Suprema Nixon entregó las grabaciones en las que se le escuchaba aprobando un plan para distraer la investigación del FBI sobre el robo”, añade.

“Curiosamente, los protagonistas del Washington Post han desestimado esta narrativa dominante. Woodward, por ejemplo, dijo una vez que ‘la mitificación de nuestro papel en Watergate ha llegado a alturas absurdas, en las que periodistas escriben que yo solo tumbé a Richard Nixon. Completamente absurdo’”.

pd: el resto del texto de Campbel sobre los mitos de Watergate (que también permite comprender por qué si cayó Nixon y en la Argentina no cae ni un concejal), acá.

lunes, 18 de junio de 2012

Traducido al español

Mérito de uno de los editores de Política, parece que al fin logré escribir un artículo en español. También me pidió un punteo de fechas de la trama ex Ciccone - AFIP para ayudarle a entender a los lectores lo que yo quería contarles sobre cómo fue el trámite con el que intentaron comerse $ 185 millones (y, en un segundo intento, $ 140 millones). El punteo, pues, es este:
  • 14 de octubre de 2010: la ex Ciccone pide a la AFIP una moratoria con quita de intereses, honorarios y multas a pagar en 20 cuotas anuales (una por año) sin interés por un total de $ 62,7 millones, es decir, con una quita del 75% sobre el total adeudado ($ 247 millones)
  • 25 de octubre de 2010: el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, le envía el pedido excepcional de la ex Ciccone al entonces ministro de Economía, Amado Boudou, y le advierte que su opinión será “determinante” para concederle o rechazarle el pedido
  • 8 de noviembre de 2010: aunque Boudou remarca que debe instrumentarse “sin mengua del interés fiscal”, firma una nota apoyando “la petición formulada por Ciccone”

  • 18 de noviembre de 2010: Echegaray da su “visto bueno” al pedido; pero en esa misma foja (¿cuándo?) de manera sorpresiva, añade a mano y en apenas una línea que la ex Ciccone debía ajustar su pedido a la resolución 970, por hasta 96 cuotas mensuales; a partir de allí el expediente muestra curiosos movimientos y faltantes de páginas;
  • 29 de diciembre de 2010: LA NACION revela que la AFIP se aprestaba a darle una moratoria con una quita multimillonaria del 75% a la ex Ciccone;
  • 29 de diciembre de 2010: la AFIP desmiente a LA NACION, mientras que al mismo tiempo le notifica a Vandenbroele (como nuevo presidente de la ex Ciccone) que debe ajustar su pedido a la resolución 970 (¿Por qué recién ese día, horas después de que LA NACION publicó su artículo? ¿Por qué recién 41 días después de que así lo dispuso Echegaray? ¿O acaso Echegaray antedató su orden de ajustar el pedido a la 970?);
  • 30 de diciembre de 2010: la AFIP omite toda alusión a la resolución 970 y le informa al juez de la quiebra de la ex Ciccone que rechazó el pedido de moratoria de la empresa;
  • 14 de noviembre de 2011: Vandenbroele vuelve a pedir una moratoria excepcional ante la AFIP; basa su pedido en el artículo 32 de la ley 11683, en vez de en la resolución 970;
  • 7 de diciembre de 2011: la AFIP le otorga a la ex Ciccone dos moratorias “del artículo 32” (no en base a la 970 como había dispuesto Echegaray); la empresa deberá pagar su deuda en 148 cuotas (no en 96 como impone la resolución 970) por un total de $ 107 millones;
  • 6 de febrero de 2012: estalla el escándalo Ciccone – Boudou;
  • 23 de febrero de 2012: la AFIP detecta que “por error” omitió incluir $ 140 millones en las moratorias concedidas a Ciccone; le entrega otras dos moratorias con 148 cuotas más (“del artículo 32”) por ese dinero faltante;
  • 9 de marzo de 2012: en conferencia de prensa, Echegaray sólo indica que se le entregó una moratoria a la ex Ciccone (calla todo lo demás); afirma que no podía concederle una quita porque carecía de facultades legales para hacerlo y que por eso se consultó a Boudou.

pd: la nota publicada en LA NACIÓN, acá.

domingo, 17 de junio de 2012

Al ritmo de los medios

Lanzada a toda velocidad para concederle la moratoria excepcional que había solicitado la ex Ciccone Calcográfica, la actuación de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) en el expediente administrativo muestra, sin embargo, una notable correlación con artículos publicados a fines de diciembre de 2010 por LA NACION.


Así, recién horas después de que el diario reveló, el 29 de diciembre de 2010, que la AFIP se aprestaba a condonarle el 75% de su deuda a la ex Ciccone, la AFIP reaccionó con un comunicado furibundo en el que desmintió que fuera a hacerlo. Y sólo entonces le notificó al presidente de esa empresa, Alejandro Vandenbroele, que debía ajustar su pedido a la resolución 970/01, tal como Ricardo Echegaray había dispuesto, al parecer, 41 días antes, según consta en la segunda copia de la foja 66 del expediente -la que sí incluye su orden- que obtuvo LA NACION.

Más notable aún, cuando al día siguiente, el 30 de diciembre de 2010, LA NACION publicó la desmentida de Echegaray, pero el diario insistió con la posible quita a favor de la ex Ciccone, la AFIP presentó un escrito en el expediente de la quiebra. Allí ya ni siquiera consignó que el pedido debía ajustarse a la resolución 970/01. Directamente le informó al juez que le había rechazado la solicitud.

pd: el resto del recuadro publicado hoy en LA NACION, acá.

Dos versiones para un documento

El primer pedido de moratoria que hizo la ex Ciccone Calcográfica fue el más polémico de todos. Y aunque al final esa solicitud inicial fue rechazada, demostró la disposición que había en el Gobierno por beneficiar a la empresa con beneficios especiales.

Este intento incluyó una jugada desconocida hasta ahora. El titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, buscó otorgarle a la empresa una quita explosiva, que poco después, cuando La Nación difundió la decisión, intentó diluir con un desprolijo agregado a mano en el expediente para atenuar el grado de beneficios.


El primer pedido que hizo la ex Ciccone para afrontar su deuda consistió en un plan de 20 cuotas anuales –una por año–, sin intereses, y sólo por el capital adeudado. Es decir, que sobre una deuda total de más de $ 247 millones, sólo devolvería $ 62,7 millones. Es decir, el 25,3% del total.

Así se inició el expediente administrativo 1-257899-2010, que es el que trata en la AFIP el pedido de la imprenta. Ese documento circuló por varias áreas de la agencia, en las que se sostuvo que Echegaray podía arrogarse facultades propias del juez de la quiebra, Javier Cosentino, y disponer quitas sobre las deudas de la empresa, apoyado en las facultades discrecionales que le otorga el artículo 32 de la ley 11683, que es la que define el funcionamiento de la AFIP.

pd: el resto de la nota publicada hoy en LA NACIÓN, acá.

viernes, 15 de junio de 2012

Más dudas que "La Chiqui"

Más problemas para la misteriosa The Old Fund. Tras revisar cientos de páginas de documentos, la sindicatura que controla el resurgimiento de la quiebra de la ex Ciccone Calcográfica alertó que el contrato que une a ambas sociedades debió contar con una autorización judicial previa ya que, por sus características singulares, podría encontrarse prohibido.


(Así las cosas, el contrato tiene más dudas que la Chiqui Legrand: "¿Lo digo o no lo digo? Hmmm").

El planteo de la sindicatura se centra en el contrato que sellaron The Old Fund y la ex Ciccone, por el que a cambio de recibir $ 50 millones la imprenta cedió todos sus derechos de cobro sobre toda su facturación a la sociedad cuyo único rostro visible desde que estalló el escándalo es Alejandro Vandenbroele, al que la Justicia investiga como presunto testaferro del vicepresidente Amado Boudou.

La conclusión de la sindicatura sumó así otra complicación para The Old Fund –cuyos verdaderos dueños y el origen de esos $ 50 millones aún permanecen en las sombras–, luego de que LA NACION reveló en su edición de ayer que su legajo societario de desapareció –o alguien se lo robó– de la Inspección General de Justicia (IGJ), el órgano dependiente del Ministerio de Justicia de la Nación que está a cargo de controlar las sociedades en el ámbito nacional y porteño.

pd: el resto de la notita publicada hoy en LA NACIÓN, acá.

Después no digas que no te avisé

Fechado el lunes 8 de noviembre de 2010, el dictamen del director general de Asuntos Jurídicos del Ministerio de Economía, José Guillermo Capdevila, fue contundente. Tanto al oponerse a que el ministro Amado Boudou opinara sobre el pedido de moratoria de la ex Ciccone Calcográfica como al consignar que los datos con los que avanzaba la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) eran, cuando menos, escasos e insuficientes.


Capdevila detalló, entre otros faltantes, que en el expediente de la AFIP no constaba el dictamen del área jurídica del propio organismo recaudador, el testimonio o una copia certificada de la sentencia que verificara sus créditos en el expediente judicial de la quiebra, o siquiera "un informe sobre el estado de la causa". Por lo tanto, estimó, "la opinión a verter se encuentra limitada".

A lo largo de los siguientes doce párrafos del dictamen DGAJ 222.012, Capdevila expuso además la incompetencia de Boudou para opinar sobre Ciccone y las facultades propias con las que contaba Echegaray para decidir por sí solo.

pd: el resto de la nota publicada ayer en LA NACIÓN, acá.

jueves, 14 de junio de 2012

Y dónde está el legajo!?!?

The Old Fund, la oscura firma que controla a la ex Ciccone Calcográfica sumó otro capítulo a su misteriosa foja de servicios. Desapareció su legajo en la Inspección General de Justicia (IGJ) –o alguien se lo robó– por lo que las autoridades del organismo iniciaron la reconstrucción de su expediente, según confirmaron desde el ente oficial de contralor.


Desde la IGJ indicaron que el grueso del legajo podrá reconstruirse fácilmente, en base a los documentos protocolizados y escaneados por el propio organismo. Pero ciertos movimientos registrados en el legajo original de The Old Fund serán más difíciles –o imposibles– de reconstruir. En particular, los papeles que exponían la actuación de la propia IGJ, de sus inspectores o de los profesionales intervinientes en, por ejemplo, el llamado “dictamen precalificatorio”.

La reconstrucción del legajo de The Old Fund –cuyos verdaderos dueños y el origen de los $ 50 millones que aportó en la ex Ciccone también continúan en las sombras– abarca un extenso listado de documentos. Desde su estatuto de constitución, hasta los cambios de domicilio, como así también las actas de directorio y asambleas, con datos sobre cómo fueron los aportes de capital y cuándo desembarcó Alejandro Vandenbroele, el abogado investigado por la Justicia como presunto testaferro del vicepresidente –en ejercicio de la Presidencia– Amado Boudou.

pd: el resto de la nota publicada hoy en LA NACIÓN, acá.

miércoles, 13 de junio de 2012

Impunidad - cinco muestras y un botón

Uno. Allá por diciembre de 2008, la multinacional Siemens AG reconoció sus pecados a nivel mundial y admitió que pagó coimas en la Argentina (y otros 23 países), pero acá no pasó, ni pasa, naranja-fanta. Ni un funcionario procesado por la Justicia local.

Dos. Skanska también reconoció que derrapó, echó a patadas (pero con indemnización plus) a sus ejecutivos locales y arregló sus cuentas con la AFIP. Pero la Justicia local llegó a decretar la inexistencia del delito (es buenísima: el delincuente admite que delinquió y el juzgador le dice que no, que no es así, que no delinquió).

Tres. Un ex director del Banco Nación, Alfredo Aldaco, se arrepintió de haber participado en el negociado con IBM y durante seis años -el máximo de la pena posible para él- se autoimpuso una suerte de arresto domiciliario absoluto. No salió de la casa ni para eventos sociales, familiares o personales. Nada. Cero. Enjaulado. Pero ahora, cerca de 19 años después, la Justicia no arribó a una condena -ni contra él, ni contra ningún otro-, ni completó el decomiso de los fondos.

Cuatro. El valijero de las “Coimas en el Senado”, Mario Pontaquarto, detalló con precisión cómo se repartió la tarasca para aprobar la reforma laboral durante el gobierno de la Alianza, y acá estamos. Aún seguimos a la espera del juicio oral, 12 años después del estallido de aquel escándalo.

Cinco. Todo un pueblo cordobés voló por los aires para ocultar el tráfico de armas durante el gobierno de Carlos Menem. Pero la Justicia absolvió al ex Presidente, a Emir Yoma y otros 16 acusados. Poco faltó para que la Justicia concluyera que no, que no voló ningún pueblo por los aires.

Vistos los cinco ejemplos precedentes, ¿por qué el valijagate, el “caso Antonini”, iba a terminar distinto? (Y doy otro paso: ¿por qué suponer que el "caso Ciccone" terminará mejor?).


¿Pudo terminar mejor? Sí. ¿Pudo terminar peor? Si el escándalo no hubiera sido gigantesco, también. Más aún cuando los gobiernos de Estados Unidos y de Venezuela no colaboraron con la Justicia local -por sus pedidos sobre Guido Alejandro Antonini Wilson, y Diego y Daniel Uzcátegui, respectivamente-, que a su vez tampoco se mostró demasiado interesada por avanzar.

Así, gracias a una reforma de la ley antilavado que eliminó el agravante que llevaba al doble la penas para los funcionarios públicos (el agravante se les olvidó -nada deliberado, por supuesto- a los funcionarios y opositores que algún día podrían llegar a ser funcionarios se les escapó), el ex “señor de los peajes”, Claudio Uberti, quedó libre de culpa y cargo. No por falta de pruebas, sino por prescripción de la acción penal. Es decir, que se agotó el tiempo procesal para investigarlo.

Esto, que se veía venir (de hecho, en el diario lo anticipamos en abril de 2011, ver acá, y lo reiteré en enero de este año, ver acá), aún así resulta chocante. Más aún cuando coincide con ciertas fechas singulares. Porque así como el sobreseimiento del matrimonio Kirchner por presunto enriquecimiento ilícito quedó firme (por una inusual falta de apelación) el Día de los Santos Inocentes (28 de diciembre de 2009), la confirmación de la falta de mérito para Uberti llegó sobre el día de su cumpleaños (diciembre de 2008), y su sobreseimiento definitivo, para el Día del Periodista.

Cualquier coincidencia es, obvio, pura coincidencia.

pd: más datos sobre el fallo que benefició a Uberti, ver acá, acá y acá.

martes, 12 de junio de 2012

Bernie & Company

Paso el dato sobre un libro que se las trae. “Madoff & Cía.”, cuyo subtítulo es por demás elocuente: “Vida y milagros que los hombres que cometieron los grandes fraudes financieros de la historia del capitalismo”.


Los casos del libro, obvio, no tienen desperdicio: desde el inventor del papel moneda, John Law, que tuvo en sus manos el destino de Francia, a la gran estafa del diamante de 1872, pasando por el fraude del aceite de ensalada del imperio Tinpo, el más reciente escándalo de la Société Générale y, claro, Bernard Madoff.

El diario El País de España remarca, sin embargo, la singularidad del caso Enron. “Y no por nuevo”, recuerda. “Y no por nuevo. Los ingredientes que aparecen en la estafa de Enron se habían visto antes y se ven (y se sufren) después: desregulación, gestores que engañan a sus accionistas y empleados, ruinosas inversiones que no aparecen en los libros de contabilidad de la empresa, complicidad de los supuestos vigilantes del mercado (en este caso de las consultoras), oscuras relaciones con el poder...”.

pd1: el link a la nota de El País, acá.

pd2: el link a un capítulo del libro, acá.

lunes, 11 de junio de 2012

Con amigos así...

Una forma más sencilla de entender cuál fue el rol del entonces ministro de Economía, Amado Boudou, en el "caso Ciccone", más aún a la luz de la nota previa que le envió el titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Ricardo Echegaray, es la siguiente:


En mi barrio, por algo como esto pero relacionado a uno de los propios, los muchachos dirían que Echegaray "es un amigo" y que a Boudou "lo tiró abajo del mionca". Pero eso es en mi barrio. Y mi barrio es mi barrio...

pd: la nota publicada ayer en LA NACIÓN, acá.

domingo, 10 de junio de 2012

Boudou, el determinante (según la AFIP)

Corría octubre de 2010 y la ex Ciccone Calcográfica había pedido una moratoria excepcionalísima. El titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Ricardo Echegaray, no fue con vueltas y en el mismo expediente le mandó un mensaje directo al entonces ministro de Economía, Amado Boudou.


Le advirtió que la posición que tomara el hoy vicepresidente de la Nación sobre ese pedido sería "determinante" para decidir si le otorgaba a la empresa de Alejandro Vandenbroele un plan de pagos que incluyera una multimillonaria quita de intereses y multas.

La categórica posición de Echegaray consta en el expediente de la AFIP 1-257899-2010, que se abrió tras el pedido de la ex Ciccone, cuya copia obtuvo LA NACION , y que terminó por remitirse a la Justicia. Allí, el zar de los impuestos expuso que no tomaría una decisión si Boudou no daba su parecer sobre la empresa en la que cuatro días antes había desembarcado de manera formal Vandenbroele, investigado por el juez Ariel Lijo como presunto testaferro del vicepresidente.

pd: el resto de la nota publicada hoy en LA NACIÓN, acá.

sábado, 9 de junio de 2012

Estoy de vuelta

Qué: muestra plástica "Estoy de vuelta".

Quién: el artista Justo Antonio Sanz.

Dónde: Centro Cultural Borges (Viamonte y San Martín).


Cuándo: del 31 de mayo al 17 de junio.

Por qué: porque es un amigo, porque es un maestro, porque lo vale.

pd: más datos del maestro Sanz, acá.

viernes, 8 de junio de 2012

Escenas de la vida periodística cotidiana

Escena I
Tres meses de trabajo fructifican, al fin, en la obtención de un material preciado. Que permite, entre otras posibilidades, comprender que la AFIP emitió no una, sino cuatro moratorias excepcionales a favor de la ex Ciccone Calcográfica. Y que en las primeras dos omitió incluir los intereses resarcitorios y punitorios acumulados durante años. Es decir, que la empresa de Alejandro Vandenbroele acordó pagar $ 107 millones cuando debió pagar $ 247 millones. Y que esos intereses sólo se incluyeron en las dos nuevas moratorias que se armaron sólo luego de que estalló el escándalo. Es decir, un bombazo. Ergo, los editores deciden llevarlo a la tapa del diario.


Escena II
Se viene el brindis por el Día del Periodista. Suena el teléfono del colega y amigo, Hernán Cappiello. Le chiflan que sobreseyeron a Claudio Uberti en alguna causa. Comenzamos a averiguar. Y cuando comienzan a chocar las copas, confirmamos que es en la causa Antonini. Fallo de Cámara. ¿Patética casualidad o cínica dedicatoria a los periodistas que investigamos el caso? Ni vale la pena pensar en eso. Más aún cuando se veía venir (ver acá, de enero de este año, y acá, ya en abril de 2011).

Escena III
Otros temas matan a la nota Ciccone. Tres meses de laburo y de picar piedra, y el material no llega a la tapa. Va adentro. Tocó perder. Y el sobreseimiento de Uberti, al que dediqué tantas horas, días, semanas, meses, años (y un libro) tampoco llega a la tapa. También va adentro. Temas más urgentes o coyunturales les ganaron. Son las reglas de juego. Periodismo explícito, alejado de las fantasías idílicas o conspirativas de quienes jamás pisaron una redacción y opinan como si fuera sabios u oráculos.

Escena IV
Llego a casa. Día largo. Celular apagado. Y mi mujer me avisa: se bajó Reposo. Vuelta a empezar.

pd1: la nota sobre el caso Ciccone, acá.
pd2: la nota sobre el caso Antonini, acá.

jueves, 7 de junio de 2012

Día del vicio

Para Gabriel García Márquez es “el mejor oficio del mundo” (ver acá). Pero otros muchos no están tan seguros. No sólo en la Argentina, sino que al parecer resulta una impresión urbi et orbi.

Como muestra, baste un botón: en el ranking anual del portal “Career Cast” de búsqueda de empleos para Estados Unidos y Canadá, el periodismo gráfico y audiovisual figuró entre los 10 peores oficios sobre un total de 200 evaluados.

El periodismo audiovisual quedó en el puesto 191°; y el gráfico quedó aún peor: 196°. Y esto, según una ecuación que incluye mediciones de salarios, salida laboral y estrés, entre otras variables. ¿Peor que un periodista? Ser un soldado raso, laburar en un pozo petrolero, criador de vacas, leñador...

Pero como solía repetir mi viejo, "me ne frega". Es decir, que aunque el periodismo parezca (o resulte) horrible, me gusta; aunque pague mal (y paga mal), me gusta; aunque me puteen y coseche furia con cada nota, me gusta; aunque el estrés me mata, me gusta; y aunque no haya muchas oportunidades laborales (y me consta), me gusta.


Y aunque una vez por semana tengo ganas de mandar todo (y a todos) a mejor suerte, sigo. Y aunque me duele no estar todo lo que debería con mi familia, sigo. Porque el periodismo no es una profesión, ni un oficio. Es un vicio. Y estoy enviciado, quí li viá ser.

Ergo, a tod@s l@s demás vicios@s y enviciad@s, mal pag@s, reputead@s, estresad@s, con una pata en la calle y otra frente a la compu (porque encima escribimos con los pies, si no nos dedicaríamos a la literatura),


FELIZ DÍA.


Porque no hay nada más lindo que hacer lo que nos gusta.

pd1: la info sobre el ranking la obtuve en el portal “Diario sobre Diarios” (ver, acá); los datos originales de “Career Cast”, en inglés, acá.

pd2: y si te lo preguntabas: el mejor oficio, al parecer, es el de ingeniero informático.

pd3: y si acaso te interesa, sí, ese es mi escritorio en la redacción.

miércoles, 6 de junio de 2012

Acertijo doble

El misterio alrededor de la ex Ciccone Calcográfica es cada vez mayor. Tras revisar informes que sumados acumularon cientos de páginas, el síndico que controla su resurgimiento de la quiebra no logró resolver los dos grandes enigmas que rodean a la empresa que preside Alejandro Vandenbroele: quiénes son sus nuevos dueños y quiénes aportaron más de $ 47,5 millones que la imprenta utilizó para afrontar salarios y deudas durante los meses previos a obtener sus primeros contratos con el Gobierno.


Ambas incógnitas quedaron expuestas en el expediente de la quiebra de la ex Ciccone que tramita ante el juez en lo Comercial Javier Cosentino, luego de que el síndico Martín Stolkiner presentó su último informe el viernes último, pero que sólo resultó accesible desde ayer.

Stolkiner expuso que pudo revisar balances, estados contables, auditorías y otros documentos de la empresa, pero en lo que quedó claro que Vandenbroele –investigado por la Justicia por lavado de activos y como presunto testaferro del vicepresidente Amado Boudou– intentó afrontar ambos enigmas del modo más escueto posible.

La ex Ciccone, por el contrario, sí aportó más detalles sobre cómo incumplió con el pago de los aportes previsionales de sus trabajadores, rojo que luego cubrió con múltiples moratorias de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP).

pd: el resto de la nota publicada hoy en LA NACIÓN, acá.

martes, 5 de junio de 2012

Reescribir la historia, versión rusa

Allá lejos, en la Rusia de los tiempos que corren, Vladimir “KGB” Putin nombró como flamante ministro de Cultura a Vladimir “Me la doy de historiador” Medinsky.

¿Qué tiene de peculiar el tal Medinsky (foto, abajo)? Pues que el hombre se lanzó a reescribir la historia rusa, borrar ciertos capítulos y mejorar otros. Y esto, además de plagiar –y así fue denunciado– tramos completos de su tesis doctoral.


¿Qué tramos de la historia rusa reescribe Medinsky? Entre otros, según expone un estupendo artículo de la revista The New York Review of Books, que el zar Iván, alias “El Terrible”, no fue tan terrible después de todo, sino que más bien, fue bastante cándido y simpático. O que la foja antisemita rusa es pura exageración. O, incluso, que la Unión Soviética jamás invadió y ocupó los países bálticos o Polonia durante la II Guerra Mundial. Y, por supuesto, que es una mentira burda que un número enooooooorme de prisioneros de aquella guerra hayan sido enviados a campos de labor (léase “concentración”) al concluir el conflicto.

Ahora bien, ¿para qué se metió Putin en semejante embrollo histórico con su tocayo Medinsky?

Pues porque como explica Clifford Gaddy, del Brookings Institute de Washington, Estados Unidos: “Para Putin, la interpretación y reinterpretación de la historia es un asunto crucial… Él valora el poder de la ‘historia útil’, la utilización de la historia como una herramienta política, como una fuerza organizadora política y social que puede ayudar a moldear la identidad de grupo y alentar coaliciones”.

En otras palabras, orwellianismo puro: para controlar el presente y moldear el futuro, hay que primero apropiarse del pasado.

pd: cualquier semejanza con otros líderes y dirigentes más cercanos (de varios países, gobiernos, partidos políticos o sectores sociales), es pura coincidencia (o delirium tremens del lector).

pd2: el link al artículo original, en inglés, acá.

lunes, 4 de junio de 2012

El Banco Central sabía

El Banco Central (BCRA) conoció y aceptó de manera explícita que la ex Ciccone Calcográfica se encargue de parte de la impresión de los billetes de 100 pesos, según consta en el contrato que la entidad monetaria que preside Mercedes Marcó del Pont [foto, abajo] firmó el 12 de abril con la Casa de Moneda.


El contrato entre ambos organismos dejó al Central como verificador último de las "medidas de seguridad adecuadas y comprometidas" para imprimir los billetes. También, como supervisor final del cumplimiento de las leyes antilavado, tributarias y previsionales por la empresa que preside Alejandro Vandenbroele, investigado por la Justicia como presunto testaferro del vicepresidente Amado Boudou y por presunto lavado de activos por cerca de $ 50 millones.

Esas obligaciones surgen de las cláusulas 10° y 11° del contrato que firmaron la gerenta de Comercialización de la Casa de Moneda, Mónica Beatriz Canalini -la misma funcionaria que cuatro días después rubricó el convenio con Vandenbroele- y la subgerenta general de Administración y Servicios Centrales del BCRA, Silvia Traverso, de extrema confianza de Marcó del Pont.

Y a todo eso se le agrega un detallito: la ex Ciccone ya tenía vencido su certificado fiscal, indispensable para firmar contratos con el Estado. Desde un día antes, el 11. ¿Y entonces?

pd: el resto de la nota publicada el domingo en LA NACIÓN, acá.

domingo, 3 de junio de 2012

$ 160,7 millones para Vandenbroele

Compañía de Valores Sudamericana (CVS), la ex Ciccone Calcográfica, ya cobró $ 17,6 millones de la Casa de Moneda como adelanto y primer canon mensual por el contrato que firmó para la impresión de billetes de 100 pesos, según surge de la copia de ese convenio que obtuvo LA NACION. Y se apresta a cobrar, antes de este martes, otros $ 9,8 millones. En total cobrará $ 160,7 millones por el acuerdo que se extenderá hasta fines de año.


El contrato, de alquiler parcial y no exclusivo de la capacidad productiva de la ex Ciccone, lo firmó el supuesto testaferro del vicepresidente Amado Boudou, Alejandro Vandenbroele, el lunes 16 de abril último, y horas antes de que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner anunciara la expropiación de YPF por cadena nacional.

Negado por el jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, en su exposición del miércoles ante el Senado, el contrato salió a la luz, sin embargo, gracias al propio funcionario de extrema confianza de la Presidenta. Abal Medina –o uno de sus colaboradores– se lo envió a la senadora radical Laura Montero como anexo a su respuesta a la 297° pregunta del pedido de informes que la legisladora le envió semanas atrás. Fue el único documento, de todos los solicitados, que sí entregó.

pd: el resto de la nota publicada hoy en LA NACIÓN, acá.

viernes, 1 de junio de 2012

Boudou y sus convenios con Clarín

Socios en Ecoplata, Fernando Piovano y José María Núñez Carmona no terminaron bien. Ni en esa empresa, ni tampoco en otro emprendimiento que abarcó dos firmas y un contrato: el canal de cable CCTV, el servicio postal OM Buenos Aires SA y la distribución de las facturas y las revistas de ese cable. Más relevante, la pelea terminó en juicio, que terminó por pagar Multicanal, del Grupo Clarín.


Todo ocurrió a fines de los ‘90s, cuando Piovano lanzó CCTV, para luego vendérselo a Multicanal, mientras que le vendió a Núñez Carmona un contrato para la distribución postal por 10 años, pero que el socio de Boudou consideró luego fraguado y lo demandó. Desde hace al menos cinco años protagonizan un juicio por daños y perjuicios (expediente 9916) en el Juzgado Civil y Comercial N° 14 de Mar del Plata.

Así fue como, tras un primer acuerdo (en dos tramos) fallido, el socio de Núñez Carmona, Amado Boudou, firmó un segundo convenio “por reajuste de precios” con abogados del Grupo Clarín. Fue en enero de 2004 y con dos tramos. El primero por 179.000 segundos de publicidad –equivalente a unos 216.359,18 dólares–, más otro por 325.000 segundos. Es decir, un total de 504.000 segundos que equivaldrían  a poco más de 600.000 dólares.

pd: el resto de la nota publicada en LA NACIÓN, acá.