Aquella noche, el "Va' pensiero" del Nabucco de Giussepe Verdi, encarnación de tanta vida política, cultural y social de Italia, recobró su significado. Ocurrió poco después de que Berlusconi recortara los "gastos" culturales, para luego asistir a la gala desde el palco oficial.
El coro concluyó el "Va' pensiero" y el público congregado en la Ópera de Roma lo ovacionó, para luego pedir que lo repitieran. Muti sólo una vez, 25 años antes, accedió a ese pedido. Pero esa noche no era otra noche más para el maestro.
Dijo Muti: "Ya no tengo 30 años y he vivido mi vida, pero como italiano que ha recorrido el mundo, tengo vergüenza de lo que ocurre en mi país. Así pues, accedo a vuestra petición de bis para el 'Va' pensiero'. No es solo por la alegría patriótica que puedo sentir, sino porque esta noche, mientras dirigía el coro que cantaba 'O mi país, bello y perdido', pensé que si seguimos así, vamos a matar la cultura sobre la cual se ha construido la historia de Italia. En cuyo caso, nuestra patria, estaría realmente perdida".
"Desde que reina por aquí un 'clima italiano', yo, Muti, me
he callado durante demasiado tiempo. Querría ahora… deberíamos dar un sentido a
este canto; como estamos en nuestra casa, el teatro de la capital, y con un coro que ha cantado magníficamente, y que está magníficamente acompañado, si les apetece, les propongo que se unan a nosotros para cantar todos juntos".
El video dura 8 minutos y medio. Vale cada segundo.
La crónica de aquella noche emocionante en "Il Corriere della Sera", acá.
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